Un día azul
Nos despertamos con una sensación olvidada, una temperatura afable invitaba a abrir las cremalleras del saco para despertarse cómodamente. La meteorología estaba de nuestra parte y aprovechamos mientras los pantalones se secaban para almorzar bajo el fantástico sol. Dedicamos media mañana a mimar nuestra Frankenstein. Engrasamos la cadena, lubricamos los cables del[…]